Intel organizó ayer en Madrid una exposición con muchas de las novedades que se encontrarán los usuarios de PC en las tiendas desde ahora y hasta Navidad. En el espacio habilitado por el fabricante de procesadores se vieron muchos portátiles con Intel Core i3, i5 e i7 (en julio la mitad de los ordenadores provistos de un chip de Intel pertenecían a estas familias). Además, hubo sitio para los todo-en-uno con pantalla táctil. Siguiendo la estela de HP, que presentó un TouchSmart con Core i5 que todavía no tiene precio definitivo, se pudieron ver las propuestas de Acer, Medion y Packard Bell.
El equipo de Intel España aprovechó también el encuentro para dar a conocer varios estudios sobre la industria del ordenador que aportan, en general, buenas noticias. Una es que, según Gfk, la intención de compra de ordenadores ha subido un 10% este año en España con respecto a 2009. Asimismo, el presupuesto medio también ha subido un 10%, hasta situarse en los 700 euros. Por otra parte, Gfk, que realizó su estudio haciendo más de 2.000 entrevista a principios de verano, demuestra que uno de cada tres máquinas vendidas es un segundo dispositivo.
Según Intel, ahora es más fácil vender portátiles de gama media y alta que antes. Y es que los usos que se imponen demandan ahora más rendimiento de la máquina. Aunque navegar por Internet y enviar correos electrónicos siguen siendo las tareas más habituales de los usuarios españoles, cada vez más usuarios almacenan fotos y vídeos, interactúan en redes sociales o juegan. Esta información coincide en el tiempo con otra de Gartner que asegura que la venta de netbooks o portátiles de bajo coste (en torno a los 300 euros) ha dejado de crecer al ritmo frenético de los últimos años y que en los próximos ejercicios reducirá incluso su peso. Según esta consultora, los miniportátiles low-cost pasarán del 18% actual al 10% en 2014.
Otros datos de Intel procedentes de un estudio mundial dicen que los usuarios cada vez crean y editan más contenidos propios en Internet. Asimismo, la compañía confirma que el consumo de vídeo online está en alza, no sólo entre los jóvenes, sino en la franja de edad por encima de los 65 años. En Estados Unidos, uno de cada cuatro mayores lo hace habitualmente.