Samsung ha postpuesto de forma indefinida el lanzamiento de Tizen, su sistema operativo para smartphones basado en código abierto. En un comunicado hecho público por la compañía, el fabricante coreano ha aludido a la carencia de un ecosistema de aplicaciones competitivo como la razón que ha motivado la decisión de abandonar este desarrollo. Las expectativas creadas en torno a Samsung Z, primer dispositivo que incorporaba el sistema operativo, y que se iba a presentar oficialmente este mes en Rusia, han caído en saco roto.
Con el lanzamiento de este sistema operativo Samsung competiría frontalmente con Android, la plataforma propiedad de Google en la que están basados la mayoría de sus dispositivos. La decisión por tanto de apostar por esta nueva línea de desarrollo tendría consecuencias significativas en el negocio de la empresa y supondría un riesgo quizás mayor del previsto por los directivos de la firma coreana.
A pesar de ello, Samsung no quiere abandonar el desarrollo de Tizen y seguirán apostando por esta plataforma aunque se desconoce cuándo anunciarán el lanzamiento definitivo de Samsung Z. Mientras tanto, la empresa continúa dando señales contradictorias tras anunciar que el último modelo de relojes inteligentes Gear no estaría basado en este sistema operativo a pesar de que sus predecesores sí lo incluían.
El Samsung Z se basa en una pantalla de 4,8 pulgadas con una resolución de 1.280 x 720 píxeles, que promete una visualización de los contenidos de calidad. Además, cuenta con un procesador de cuatro núcleos a 2,3 gigahertzios y 2 Gb de RAM.
