Si se echa un vistazo a la página siguiente, se podrán comprobar las similitudes que comparte con el modelo analizado de Airis. Este parecido es aplicable tanto a sus especificaciones internas como al cuerpo externo de la máquina. Sin embargo BenQ ha cuidado los embellecedores y la calidad de la pantalla, al tiempo que incorpora un adaptador de corriente AC con el pack.
La semejanza también se traslada a los resultados de los tests, ya que las prestaciones de ambos productos, sobre todo en lo que se refiere al tratamiento de la luz y al enfoque en condiciones extremas, es muy parecida, con lo cual se puede intuir que el CCD de 5 millones de puntos es el mismo. Quizá en la C50, trabajando en modo automático, se observa un nivel de pixelación inferior, algo siempre de agradecer. Otras de sus características a reseñar son la resolución máxima de 2.560 x 1.920 puntos, una memoria de 32 megas SD/MMC y un zoom óptico 3X, y 4X si es digital.
No obstante, y aunque este dispositivo cuente con un precio menos atractivo (cien euros más) que su rival, donde muestra sus cartas es en el capítulo de software, con un CD que contiene aplicaciones para organizar ficheros, editar, combinar archivos de vídeo, realizar impresiones, etc.