La Comisión Europea (CE) recibió ayer poco antes de la medianoche la propuesta de Microsoft, que confirma su intención de cumplir con las medidas antimonopolio que el ejecutivo europeo le impuso en marzo de 2004. A partir de este momento la Comisión realizará un análisis exhaustivo sobre los argumentos dados por la compañía estadounidense. Microsoft ya abonó una multa cercana a los 550 millones de euros, pero aún no ha cumplido con las sanciones referidas a la información que desde proporcionar a sus competidores. La empresa de Bill Gates debe acatar aún dos medidas: conceder a sus rivales los códigos necesarios para que sus servidores y aplicaciones informáticas funcionen con Windows, y comercializar en territorio europeo una versión del sistema operativo Windows desprovisto del reproductor multimedia Media Player.
La decisión de si las propuestas enviadas por Microsoft para cumplir con las sanciones son aceptables “se comunicará antes del próximo mes de agosto”, ha asegurado Jonathan Todd, portavoz de competencia de la CE. Para este análisis, la UE contará con la ayuda de las empresas rivales del gigante informático, entre las que se encuentra Sun. Si la CE considera que la propuesta no es aceptable se iniciará un procedimiento por el incumplimiento de las sanciones, que conllevará la publicación de un documento con las objeciones del ejecutivo, momento a partir del cual Microsoft tendrá dos semanas para presentar alegaciones. La decisión podría contemplar una multa de hasta el 5% de su facturación, una cifra que ascendería a 5 millones de dólares diarios.
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