La alianza estratégica en el mundo de la virtualización del centro de datos entre VMware, EMC, Intel y Cisco derivó en 2009 en la joint venture Virtual Computing Enviroment (VCE). Tras pasar por diferentes vaivenes, EMC ha decidido tomar las riendas de la joint venture y asimilarla dentro de su propia estructura, al tiempo que Cisco pasa a representar un 10% simbólico.
En comunicado oficial emitido desde su cuartel general de Hopkinton (California), EMC ha anunciado una nueva fase en la evolución de VCE que se convierte en un negocio de EMC, mientras que Cisco y VMware permanecen como “socios estratégicos”.
VCE se va a concentrar en ofertar nubes híbridas, incluyendo una completa gama de infraestructuras convergentes, basada en sus sistemas Vblock. Desde Hopkinton garantizan que la base tecnológica seguirá siendo soportada por los tres socios.
Según la misma fuente, la cartera anual de pedidos de Vblock y servicios relacionados sobrepasó los 2.000 millones de dólares en el tercer trimestre, con una progresión consecutiva de seis trimestres por encima del 50%. IDC sitúa el gasto en infraestructura convergente en torno al 32,8% anual y estima que en 2017 alcanzará los 14.370 millones de dólares en 2017 (frente a los 5.400 millones actuales).
Más de 1.000 compañías y partners han suministrado unos 2.000 sistemas Vblock en todo el mundo y, amparándose en un estudio de IDC, VCE asegura que sus clientes son capaces de poner en marcha nuevos servicios cinco veces más rápido que su competencia, reduciendo el tiempo de caída un 96% y ahorrando en costes un 50%.
La reorganización y recapitalización de VCE se materializará el último cuarto del año y, como asegura la firma, no tendrá impacto material en la cuenta de resultados del año fiscal de 2014.