La creciente adopción de la virtualización, especialmente, de servidores, de desktops y del almacenamiento, así como los primeros pasos hacia el cloud computing en sus modelos híbrido y privado, están generando a las empresas innegables beneficios, pero también nuevos retos que es necesario solventar. Así se desprende del reciente estudio publicado por Symantec ‘Virtualización y Evolución a la Nube 2010’, el cual, muestra que existe cierta discrepancia entre las expectativas a la hora de emprender estos proyectos y la realidad conseguida, a medida que las empresas implementan dichas soluciones.   Según la encuesta, realizada a 3.700 empresas a nivel mundial, de las cuales, 1.000 pertenecen a EMEA, los CEOs y los directores financieros están preocupados por el traslado de aplicaciones empresariales críticas a entornos virtuales y a la nube por motivos de fiabilidad, seguridad, disponibilidad y rendimiento. Y es que, de acuerdo con César Cid, responsable de TSO de Symantec para España y Portugal, después de las fases iniciales, las compañías ya están empezando a trasladar aplicaciones más críticas, como CRMs o ERPs a dichos entornos, algo que los jefes de negocio miran con preocupación; supone un cambio esencial para los directores de TI, pero complejo para los ejecutivos”.
La implementación de la virtualización de los servidores es un hecho generalizado con más del 75% de las compañías que en la actualidad, están considerando la adopción de nubes privadas o híbridas. La virtualización de servidores y del almacenamiento son las tecnologías que han alcanzado mayor grado de madurez, ya que han sido adoptadas por un 45% y un 43% de las empresas, respectivamente. Por su parte, las tecnologías de almacenamiento como servicio privado son las menos maduras con un 36%.
Pero, de acuerdo con el estudio y como se ha mencionado anteriormente, en estas inversiones existen diferencias entre las expectativas y la realidad. Así, la virtualización de servidores resulta ser la más exitosa, con una media de solo el 4% de diferencia entre los objetivos esperados y los conseguidos. Las mayores diferencias se obtuvieron en escalabilidad, reducción de gastos e capital y en la disminución de los gastos de explotación.
En cambio la virtualización del almacenamiento obtuvo una media del 33% de discrepancia, siendo las mayores decepciones la agilidad, la escalabilidad y la reducción de los gastos de explotación.
En cuento a la vietualización de los endpoints, la media alcanzada fue del 26%, señalando decepciones en la instalación de nuevos endpoints, en el suministro de aplicaciones y en la compatibilidad de las mismas.
Finalmente, el uso del almacenamiento como un servicio provida no cumple las expectativas en un 37% y es que, la reducción de la complejidad fue un objetivo para el 84% de los encuestados, aunque solo fue alcanzado por el 44%
Para minimizar todas estas diferencias, desde Symantec, Cid aconseja “asegurarse de que el personal de TI y los ejecutivos compartan el mismo objetivo en dichas iniciativas de virtualización y cloud computing”. Además, “es muy importante que no se opere de forma aislada en cada uno de los entornos (físico, virtual o cloud), y que se disponga de una gestión centralizada de toda la información a través de herramientas comunes de administración”.   Por último, el directivo advertía que las empresas “deberían aprovechar al máximo las posibilidades del almacenamiento y los servidores realizando un análisis para que, en caso necesario, al emprender un proyecto de virtualización y cloud, se estudie si la infraestructura existente es la adecuada o es necesario modernizarla”.
