La victoria aplastante de Boris Johnson en las elecciones celebradas ayer en Reino Unido confirma los peores presagios y acelera la salida del Brexit de uno de sus miembros fundadores. Ni en sus peores sueños, los europeístas habían imaginado unos resultados tan negativos, que dibujan un escenario de incertidumbre en los primeros compases del ejercicio.
La mayoría absoluta de Johnson no sólo es el mejor resultado obtenido por los conservadores desde el año 1935, también es la confirmación de las peores presagios y el triunfo por goleada de los euroescépticos. Aunque todavía es pronto para conocer las consecuencias económicas del Brexit duro, lo cierto es que las empresas del sector TI esperan amortiguar los efectos de la brusca salida de uno de los principales socios de la Unión Europea.
Auqnue el Brexit no va a ser el único factor de desequilibrio, la consultora británica Context ya ha dado a conocer un informe en el que augura una ralentización del mercado europeo de PC a partir de la segunda mitad del ejercicio. La renovación de PC estimulada por el fin de soporte de Windows 7 va a comenzar a perder fuelle a partir de la segunda mitad del año. Este nuevo ejercicio los partners de canal también deberán continuar lidiando con posibles problemas de suministro de procesadores y componentes de ordenador.
El mercado empresarial será el que más se resentirá como consecuencia de todos estos factores, mientras que el área de consumo continuará creciendo gracias a la fuerte demanda de notebooks ultraligeros, chromebooks y PC para gaming. Los proyectos de transformación digital en el mercado profesional amortiguarán los efectos del parón y permitirán que se sigan demandando PC de altas prestaciones, así como nuevos dispositivos y factores de forma.
