En los últimos años el mundo de la impresión, como tantos otros, ha girado a los servicios y el software. Y por eso han aparecido compañías como TPS, un especialista en soluciones de software que ayudan a las compañías a racionalizar y gestionar mejor su parque de máquinas y su flujo documental. En su catálogo se encuentran marcas como Equitrac, OptimiDoc, Kofax, EveryonePrint o DocShare, entre otras.
Jorge Álvarez, director general de TPS, habla del negocio de su compañía, que también hace labores de consultoría, pero también de la delicada situación por la que ha pasado la impresión en España desde el estallido de la pandemia, que dejó las oficinas vacías o semivacías y, por lo tanto, el parque de impresoras bastante inutilizado.
“Por supuesto, la situación provocada por la Covid-19 afectó a casi todos los sectores, y el negocio de la impresión fue uno de ellos. Según una encuesta de Quocirca sobre el estado del canal en 2020, que investigó cómo se comportaban los distribuidores que venden servicios de impresión gestionados, el 45% de ellos había visto que los volúmenes de impresión de sus clientes habían disminuido, y la mitad de ellos notificó que sus ingresos habían descendido”.
No obstante, desde mediados del año pasado, Álvarez también nota un incremento de los proyectos de impresión porque muchos clientes se vieron en la necesidad de hacer evolucionar su parque de máquinas y sus sistemas de gestión documental. Eso provocó, según él, que en la segunda mitad del ejercicio se viera un ligero repunte de la impresión con la adquisición de equipos profesionales para el ámbito doméstico, debido al teletrabajo.
Las perspectivas del negocio en 2021 son positivas para el director general de TPS. “El mercado se recuperará en cuanto la pandemia permita volver a la normalidad. Sí que es cierto que el teletrabajo ha venido para quedarse, y esto puede implicar una ligera caída en el volumen de impresión, también generará un nuevo nicho de negocio aún sin explorar: la oficina en casa, que es un vertical con mucho potencial”. Además, está convencido de que el pago por uso va a seguir avanzando, y de que las compañías también preferirán ir hacia plataformas en la nube y con “sistemas de impresión seguros”.
“El teletrabajo generará un nuevo nicho de negocio aún sin explorar: la oficina en casa, que es un vertical con mucho potencial”, dice Jorge Álvarez
En un mundo post-covid, donde muchos empleados se han quedado trabajando en casa y con menos acceso a la impresora de la oficina, las empresas están racionalizando su infraestructura actual. Y eso implicará, según Jorge Álvarez, el uso de soluciones domésticas seguras, la integración de soluciones colaborativas entre los empleados presenciales y virtuales, la migración al cloud o la adopción de factores de sostenibilidad a la hora de implantar soluciones de impresión, entre otras cosas. Y todos estos cambios las compañías tendrán que hacerlos en el menor tiempo posible. Es decir, que a pesar de la Covid-19, no faltarán trabajo y proyectos a los especialistas de impresión.
Caída en 2020 y recuperación este año
En 2020, la facturación de TPS se acercó al millón de euros, lo que supuso una caída del 25% con respecto a 2019. Eso sí, para el ejercicio en curso Álvarez prevé una recuperación de los ingresos del 15% al 20%. TPS trabaja con muchos clientes finales, tanto del sector público como del privado, y siempre en colaboración de partners. TPS es un especialista en gestión de entornos de impresión que colabora con “distribuidores, integradores y demás figuras del canal IT”. Actualmente la compañía está identificando y reclutando nuevos socios, tanto en España como en Portugal. Por último, el directivo de TPS asegura que hoy la mayor preocupación de los clientes finales es la sostenibilidad, no sólo para hacer su infraestructura más respetuosa con el medio ambiente, sino también más asequible en costes.