Dentro del escenario económico en el que se desenvuelve España desde finales de 2008, con una sequía creciente del crédito y un consumo a la baja, hay negocios que aún son una buena inversión. Es el caso de la franquicia, un sector que en 2012 facturó 25.937 millones de euros, cifra un 1,57% por debajo de la de 2011, pero más de un 5% superior a la conseguida en 2007, antes de que se iniciase la crisis. Los datos provienen del último informe de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF), donde se certifica que el número de puntos de venta que pertenecen a una enseña franquiciadora ha ascendido a 59.758 (un 2,5% más que hace un año). Según la misma asociación, este segmento del retail da empleo en toca España a más de 246.000 personas. No obstante, la evolución del negocio va por barrios. El sector informático no es de los que más pintan en el mundo de la franquicia, y su peso es marginal, sobre todo si si se compara con el que tienen las cadenas de alimentación y restauración. Las franquicias informáticas consiguieron una cifra de negocio total de algo más de 680 millones de euros en 2012 (en la misma se incluyen los ingresos de los puntos de venta en propiedad de las cadenas y de los franquiciados). No obstante, hay que matizar que en este volumen de ventas, dato que aporta el estudio de la AEF, se agrupa a la franquicia informática con las de rotulación e imprenta, y también se incluyen los ingresos de las importantes cadenas de telefonía. Además, como decíamos más arriba, en comparación con otros sectores, el informático no es tampoco uno de los que mayor volumen aporta a sus dueños. Según el informe de la AEF, las franquicias de comida rápida tipo McDonald’s facturaron 1.957 millones de euros en 2012, o, lo que es lo mismo, 1,05 millones de euros por establecimiento y año (en esta contabilidad solo se tienen en cuenta los ingresos de las tiendas franquiciadas). Por su lado, cada tienda informática franquiciada ingresa al año, de media, 170.000 euros.
Retorno en dos años
La informática se ha convertido en un aspecto esencial del día a día y en casi todas las casas hay un ordenador o un teléfono móvil (como mínimo), por lo que el negocio, sobre todo el relativo a reparaciones, puede estar asegurado. Miguel Ángel Oroquieta, socio director de la consultora T4 Franquicias, explica que la inversión media para poner en marcha un establecimiento de una franquicia informática es de 27.039 euros. Este importe se refiere al arranque de la actividad, a lo que luego habrá que sumar los salarios de trabajadores, suministros e importes de compras, entre otros. De la misma opinión es Xavier Vallhonrat, presidente de la AEF, que cifra el desembolso inicial en una horquilla que se mueve entre los 15.000 euros y los 25.000 euros. Además, Vallhonrat aclara que el retorno de la inversión se produce en los dos primeros años de funcionamiento. ¿Por qué es una buena elección la franquicia frente a la tienda independiente? El presiente de la AEF explica que este modelo “ofrece una serie de valores añadidos y de ventajas que permiten que haya más posibilidades de éxito al montar un negocio que si se pone en marcha por cuenta propia”. Minimizar los riesgos es una de las claves para triunfar con una actividad económica en los tiempos que corren, y Vallhonrat sostiene que la franquicia parte de esta filosofía, puesto que se trata de un modelo de negocio cuyo funcionamiento ya ha sido probado por la casa matriz, lo que le ha permitido pulir los errores iniciales y transmitir un know-how al franquiciado que de otra forma no tendría. Oroquieta coincide en este diagnóstico, aunque señala que esta minimización de riesgos “en ningún caso es una garantía de éxito”, ya que el franquiciado debe hacer su trabajo para atraer clientes. Además, Oroquieta añade que la franquicia permite un “ahorro en tiempo, puesto que las principales variables para la puesta en marcha del negocio ya están desarrolladas y el empresario no tiene que darles forma y buscar soluciones a las mismas”. La marca, la imagen corporativa, los proveedores o la logística son algunas de estas variables ya resueltas. Por su lado, Vallhonrat suma dos notas más que convierten al negocio de la franquicia en una apuesta sólida: el apoyo de la casa madre a través de cursos de formación y las campañas de marketing y publicidad. Desde Megasur, empresa que cuenta con la cadena de tiendas Dynos, Antonio Gómez, coordinador del departamento comercial externo, refiere que los principales problemas a los que se enfrenta un franquiciado cuando pone en marcha su negocio son el desconocimiento del mercado, de la competencia o llegar al cliente final. Son escollos a los que Megasur da solución con su modelo ya comprobado y en funcionamiento.
Nichos de mercado
Con todo, un inversor o futuro empresario puede plantearse si es bueno abrir una franquicia con la que está cayendo. Los datos del Instituto Nacional de Estadística tasan las caídas del consumo minorista en España en estos momentos en volúmenes cercanos al 10% mensual con respecto al mismo periodo del año anterior. A ello se suma la fuerte competencia de las grandes superficies. Vallhonrat destaca que para paliar esto es fundamental la imagen y el conocimiento que se tenga de una marca, lo que ayudará a que el futuro cliente decida acudir a nuestro negocio. Por otra parte, Oroquieta manifiesta que el secreto está “en la diferenciación y en el valor añadido al cliente final”. El socio de T4 Franquicias aclara que las grandes superficies “no operan correctamente nichos de mercado”, es decir, parcelas muy concretas en las que pequeñas tiendas especializadas pueden tener su filón. Además, Oroquieta afirma que “la labor del empresario es precisamente buscar esas oportunidades que nadie ha visto y explotarlas antes que nadie y en las mejores condiciones”. Por su lado, Alfonso Ruíz, director comercial y de marketing de Ticnova (grupo con cientos de establecimientos por todo el país y que engloba enseñas como PCBox, PC Coste y Beep), sostiene que “el mundo de la informática y la tecnología siempre está evolucionando con productos nuevos y nuevas oportunidades”. Este profesional manifiesta que el servicio técnico que se puede ofrecer desde una franquicia informática es un “valor seguro” que aportar al cliente.
Canon a la baja
Con la dificultad de acceso al crédito que existe en la economía nacional, las principales cadenas de franquicias informáticas han tenido que reducir sus cánones de entrada, la cantidad mínima que el empresario debe abonar (además de su propia inversión) para poder montar una tienda con la marca y la operativa de la empresa matriz. Xavier Vallhonrat, de la AEF, reconoce que muchas franquicias han bajado su canon, pero otras han diversificado, “sacando al mercado otros modelos de negocio con inversiones más reducidas”. Por su lado, Miguel Ángel Oroquieta, de T4 Franquicias, explica que los ajustes “tampoco han sido de carácter muy drástico” y los cánones se han mantenido “en una medida algo más modesta”. Entre las cadenas hay variedad de opiniones. Antonio Gómez, de Megasur, revela que en la compañía “ahora el canon es una inversión en el propio negocio”. Megasur ha establecido una tarifa de entrada de 9.300 euros más IVA en la que se incluye el mobiliario, los luminosos, la papelería, el programa de gestión y la imagen corporativa, entre otros. Por su lado, Alfonso Ruiz, de Ticnova, explica que para las tiendas PCBox el canon se sigue manteniendo, “ya que es un negocio con una inversión más elevada y una rentabilidad más alta”. Sin embargo, Ruiz aclara que para los establecimientos con las enseñas Beep y PC Coste, la tarifa de entrada se ha eliminado.
Servicio técnico
Todos los responsables de franquicias consultados coinciden en que el perfil de la persona que abra un establecimiento debe ser el de un apasionado de la informática, así como un conocedor de la misma. Alfonso Ruíz, de Ticnova, añade la disposición para probar y aprender sobre los nuevos productos que aparecen continuamente. Sin embargo, una de las cualidades que más destaca Ruiz es la de que “le guste estar cara al público y dar un buen servicio a los clientes”. Para conseguir la mayor rentabilidad del negocio, Antonio Gómez, de Megasur, manifiesta que “hay que generar mano de obra, ya que la relación entre ventas y mano de obra es directamente proporcional: cuantas más ventas, más reparaciones”. Por su lado, Ruiz reconoce que los márgenes en ciertos productos son estrechos, “pero en otros como periféricos y consumibles son bastante llamativos, sin hablar de la mano de obra del servicio técnico”. El responsable de Ticnova explica que la estrategia de la compañía para elevar la rentabilidad de sus asociados es enfocarse en el marketing, además de negociar mejores precios en las compras por volumen.
La franquicia informática sale poco de España
Los bolsillos del consumidor español siguen atenazados por la crisis económica, financiera y laboral, así que las empresas se están empleando a fondo en buscar nuevos clientes fuera de España. Y la franquicia no es una excepción. El último informe de la AEF muestra que las enseñas españolas cuentan con establecimientos franquiciados en 123 países, con 18.688 tiendas abiertas. Sin embargo, el sector informático no destaca por esta internacionalización, ya que la mayoría de tiendas en el exterior se corresponden con los sectores de la moda, la hostelería o el mobiliario y hogar. El informe de la AEF destaca que fuera de España hay 10 enseñas informáticas en 18 países diferentes que cuentan con 157 establecimientos (frente a las 73 marcas de moda con 7.164 tiendas repartidas por 113 países, por ejemplo).
Algunas claves
-Poner en marcha un establecimiento de una franquicia informática cuesta 27.000 euros.
-El retorno de la inversión llega a los dos, según los expertos.
-El inversor corre muchos menos riesgos que montando una tienda independiente, pues el modelo de negocio ya está probado.
-El negocio empieza a funcionar antes, puesto que la marca, la imagen corporativa, los proveedores o la logística ya están en pie.
-Para superar la competencia de las grandes superficies, el franquiciado debe centrarse en nichos tecnológicos o de clientes muy concretos.
-El servicio técnico aportado desde una franquicia informática suele ser un “valor seguro”. Las reparaciones siguen siendo un buen negocio.
-El perfil de la persona que abra un establecimiento debe ser el de un apasionado de la informática.
-También es importante que el dueño sea una persona con capacidad para estar frente al público.