El próximo lunes 26 de enero Google finiquitará el programa de desarrolladores, así como la venta de sus gafas de realidad virtual. Con esta decisión, la multinacional no quiere decir al mercado que se olvida de sus Glass, sino que prefiere dejar apartado este negocio para coger fuerzas y recuperar el interés con un nuevo modelo. Al menos pretende crear una división específica centrada en este dispositivo ya que las críticas de este wearable no han sido muy buenas. Precio, autonomía y diseño han sido los principales puntos en contra mostrados por sus usuarios.
Pero mientras detiene su proyecto de Google Glass, el gigante de Mountain View, según anuncia The Information, está cerca de hacer una inversión muy grande en una empresa que lleva tiempo detrás de la creación de cohetes y satélites con el objetivo de hacer más económicas las misiones espaciales: SpaceX. De acuerdo con las fuentes consultadas por el diario, la transacción podría alcanzar los 10.000 millones de dólares aunque ninguna de las partes ha confirmado la noticia.
¿Qué podría interesar a Google de la compañía de Elon Musk? Principalmente la tecnología que se está empleando en sus cohetes, es decir, tecnología aeroespacial reutilizable que permita abaratar costes a la hora de enviar una nave al espacio o poner un satélite en órbita. No en vano, el motor de búsqueda lleva un tiempo estudiando nuevas formas de ofrecer Internet en todos los lugares del mundo y los satélites se antojan el camino más factible para hacerlo. Veremos en qué acaba la cosa.
