Durante días se habló de la posible compra de Fitbit por parte de Google, y el 1 de noviembre, en la Fiesta de Todos los Santos, se confirmó. El buscador se hace con el fabricante de relojes y pulseras de actividad por nada menos que 2.100 millones de dólares. En todo caso, es un precio bajo si se mira a la evolución de la cotización bursátil de Fitbit en los últimos tiempos. En este sentido, hay que recordar que los 7,35 dólares por acción que pagará Google están muy lejos de los más de 50 dólares que costaba cada título hace sólo cuatro años.
De esta manera, Google entra de lleno en el negocio de los wearables, donde Fitbit es una marca de referencia, aunque está teniendo problemas para competir con Apple y Samsung. Además, con la operación Google impulsará su sistema operativo para relojes y otros gadgets, el WearOS, que tiene en el watchOS de Apple un potente rival.
Además, a Google la compra de Fitbit le permitirá reforzar su negocio de datos relacionados con la salud porque la compañía adquirida tiene 28 millones de usuarios. En cualquier caso, Fitbit ya ha dicho que sus productos seguirán estando disponibles, y que estos seguirán siendo compatibles con Android e iOS.
La comprase hará realidad en 2020 porque todavía está sujeta al visto bueno de las autoridades. Por otro lado, Gartner adelanta que el mercado de los wearables moverá en 2020 más de 50.000 millones de dólares.