Las reacciones al comunicado conjunto de Google y Verizon sobre su supuesto apoyo a la neutralidad de la Red han inflamado Internet, y especialmente el gigante de la Red está soportando una auténtica lluvia de críticas.
En una propuesta de marco legal, tanto el proveedor de red como el buscador se manifestaron a favor de mantener las actuales reglas para que ningún proveedor de contenidos tenga privilegios por encima de otro.
Ambas compañías esperan así poder influir en los reguladores y legisladores en EEUU, en el debate abierto que existe en torno al principio conocido como neutralidad de la red. Este principio sostiene que los usuarios de Internet deberían tener un acceso en condiciones de igualdad a todo tipo de contenido en línea.
“El próximo YouTube, la próxima red social necesitará un Internet abierto”, dijo el jefe de Google, Eric Schmidt. “Sólo gracias a la igualdad de todos los participantes Internet pudo lograr en el pasado el éxito que tiene”.
“Dependemos el uno del otro”, aseguró Schmidt, y argumentó que las compañías de telecomunicaciones necesitan los contenidos y las de Internet, las líneas. De igual manera, el jefe de Google señaló que, en caso de ser necesario, el principio de neutralidad debería imponerse con multas por parte de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), según indican en la declaración conjunta.
De todas maneras, ambas empresas comentaron dos posibles excepciones: por un lado, y sin que haya quedado claro en qué se traducirá en término prácticos, quieren excluir de su llamamiento los “servicios ‘online’ adicionales”, como los contenidos en 3D.
Por otra parte, excluyeron el negocio de Internet móvil, actualmente en auge. Y es que los proveedores apenas consiguen actualmente en Estados Unidos expandir sus redes a la misma velocidad que se venden nuevos ‘smartphones’, lo que aumenta el tráfico de datos. Por eso, una y otra vez se cae o se ralentiza el sistema. De hecho, la FCC está tratando de establecer si las reglas de neutralidad deben regir tanto a las líneas fijas como las móviles en EEUU.
Han sido estas dos excepciones las que han encendido la mecha de la polémica. El diario The New York Times recoge las quejas de los defensores de la neutralidad de la Red, que afirman que al excluir los servicios inalámbricos, Google y Verizon están creando un vacío que podría permitir a las compañías eludir una posible regulación que trate de garantizar el carácter abierto de Internet.
Andrew Jay Schwartzman, responsable de Media Access Project y miembro de la Open Internet Coalition, sostiene que esta propuesta podría crear dos tipos de Internet, una para quienes “tengan” y otra para los que “no tienen”. “Habrá algunos servicios inalcanzables para los consumidores y ‘start-ups'”, comentó.
Incluso algunas compañías de Silicon Valley parecían desconfiar de la propuesta. Amazon.com comentó a través de un portavoz que aunque la empresa está de acuerdo en que los operadores de red puedan ofrecer servicios adicionales, están “preocupados” porque
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