Parece que los cazadores de gangas, que estaban esperando a que Intel y AMD recortaran sus precios antes de comprar, están ahora acudiendo todos a la vez a las tiendas con dinerito fresco para comprar.
De acuerdo a Asus este aumento crítico de la demanda ha provocado muchos dolores de cabeza a los fabricantes de componentes, que no pueden afrontar la situación.
La principal escasez de componentes afecta al chipset 965 de Intel. Estos aparecieron en junio y soportan los súper procesadores Conroe. Intel reservó dos factorías para producir esta familia de chipsets de forma que se pudiera hacer frente al previsible incremento de la demanda, pero eso no ha sido suficiente.
Gigabyte confirma que esa escasez de chipsets de la familia 965 afecta a varios desarrolladores, y según ellos es el G965 en concreto (destinado a PC de consumo) el mayor afectado.