El negocio de las tecnologías del hogar se ha recuperado en España, en línea con la evolución económica general. Así lo demuestran los datos de Gfk hechos públicos en un evento de la feria Melco en Madrid. Según la firma de estudios de mercado, este negocio –que incluye electrodomésticos, informática, ocio digital, electrónica de consumo o dispositivos como smartphones o wearables- creció en 2015 un 6,9%. El dato contrasta con el de años anteriores. Y es que en 2014 el ritmo de avance era mucho más lento (2,1%) y en 2013 llegó a caer un 6,4%.
En concreto, Elena Toribio, analista de Gfk, señaló que este sector facturó el año pasado por valor de 9.075 millones de euros en España, casi 600 millones más que en 2014. Y un apunte importante: por primera vez la semana más importante del año en ventas no fue la Navidad, sino la del Black Friday. Toribio se atrevió a hacer cábalas para este año y el que viene, y pronosticó que no se iba a repetir el crecimiento de 2015, aunque la tendencia al alza sí que se mantendrá en su opinión. Así, para 2016, Gfk espera que las ventas de equipamiento tecnológico para casa avancen un 2,5%, mientras que en 2017 lo harán un 1,5%.
En 2015, la categoría qué más subió fue la del aire acondicionado (un 68,4%), debido a las altas temperaturas y a que en los ejercicios previos esta gama había tenido un comportamiento muy discreto. Las telecomunicaciones, donde prima el smartphone, fue la segunda categoría por crecimiento (avanzó un 21,4%). Por su parte, las ventas de televisores descendieron “por no haber eventos importantes”, mientras que la línea blanca se recuperó un 8,3% por la propia recuperación del mercado de viviendas. En el ámbito de la informática y la electrónica de consumo, lo más reseñable fue la caída de las tabletas: un 34%.
Además, Elena Toribio avanzó tendencias para este año. Y habló de smart home, drones, impresoras 3D y relojes inteligentes como gamas a tener en cuenta por sus posibilidades de crecimiento. En el terreno del hogar inteligente, el producto que más facturó en 2015 fue la smart TV (812 millones de euros), aunque las mejores proyecciones son para la línea blanca y otros dispositivos pensados ya para la automatización del ámbito doméstico. Gfk asegura que el 43% de todas las televisiones comercializadas el año pasado en este país eran inteligentes, y también desvela que el vídeo on-demand dejó unos ingresos de 46 millones de euros, que cada vez se consume en más formatos de pantalla y que es una buena oportunidad de negocio para telecos y fabricantes de dispositivos, pero también para nuevos jugadores como Netflix, u otros que están por llegar como HBO.
Drones, impresoras 3D, smartwatches…
Por otro lado, Gfk calcula que en 2015 se comercializaron en España 26.000 drones, mientras que en todo el mundo se adquirieron 4,3 millones de unidades de estos aparatos, que dejaron unos ingresos totales de 1.700 millones de euros. “Es un mercado joven que va a crecer, tanto a nivel doméstico como profesional. Son dispositivos que mejoran tiempos y eficiencias”, señaló Toribio. Aunque Gfk no calcula todavía las ventas de impresoras 3D en España (empezará este año a hacerlo), también considera que se trata de una de las tecnologías revelación de los últimos años y que tirará fuertemente en este ejercicio.
Y, por último, la firma de estudios de mercado pone el acento en los relojes inteligentes, cuyas ventas en España se multiplicaron por tres durante 2015 (crecieron en concreto un 226%). Aunque, Toribio advirtió de que a los fabricantes les quedan aspectos por afinar para popularizar estos dispositivos y lograr que los usuarios los utilicen continuamente. “Tienen que tener una estética atractiva y deben ofrecer una experiencia de uso única y convincente”, explicó.
