Según datos de IDC, las ventas de PC en nuestro país se reducirán hasta los 3,7 millones frente a los 4 millones del pasado año, -8% menos respecto a 2021, y la facturación también se constreñirá un 5% con respecto a 2022, y no superará los 2.640 millones de euros. Esta cifra es un dato positivo respecto al ejercicio de 2022, cuando las ventas de PC se redujeron un -15%. Aunque los datos no invitan al optimismo, Salvador Cayón, responsable de canal transaccional en HP, considera que esos resultados no están tan mal si se comparan con los de hace tres años, justo antes de la pandemia. “El año pasado se vendieron 4 millones de ordenadores, lo que representó en facturación unos 2.800 millones de euros, un 15% menos respecto al ejercicio anterior. Sin embargo, si comparamos esos datos en relación al 2019, entonces vemos que el mercado creció un 27%, una cifra muy significativa”.
“Aunque el mercado PC descendió respecto a 2021, las ventas crecieron un 27% respecto a 2019, el año previo a la pandemia”
Como explica el directivo, es cierto que durante la pandemia se produjo un tsunami de ventas por la renovación de portátiles, pero en 2022 no se redujo tanto como se esperaba, teniendo en cuenta la situación extraordinaria que vivimos. En el mercado de consumo se produjo un descenso de los ingresos del -9% en relación al ejercicio anterior, pero del +34% si nos referimos al 2019.
En su opinión, el PC sigue siendo un producto esencial y lo seguirá siendo en 2023. “Todavía recuerdo aquellas voces catastrofistas que decían que el PC iba a desaparecer en unos años. Ahora nadie concibe tal cosa a pesar de la crisis económica”.
