Desde el primer momento, esta regrabadora destaca por su formato reducido. Mantiene idénticas dimensiones que las demás soluciones IDE, con la excepción de su longitud, aproximadamente cinco centímetros más corta. Esto la hace especialmente apta para su uso en los PC de salón o cuando se trate de ensamblar cajas ATX o mini ATX.
A pesar de que las especificaciones del fabricante indican unos buenos coeficientes (8x para la grabación de discos +R y 4x para R, y 4x para regrabación de +RW y 2x para RW), las pruebas han demostrado su limitación a la hora de lograr ciertas prestaciones. Así, aunque la grabación 8x sí ofrece buenos dígitos, el tiempo empleado en la prueba a 4x se encuentra entre los peores.
Compensa esta faceta con una excelente tasa de ripeo, que se realiza a 7,8x de media, mientras que las grabaciones de un CD de datos superan la barrera psicológica de los 30x, completando la “tostada” en algo más de tres minutos. El software incluido no es tan abundante como en otros desarrollos, lo que no impide que en líneas generales se pueda hablar de un dispositivo que se sitúa en la zona media-alta de la comparativa.