Después de una semana de especulaciones, Microsoft anuncia por fin sus planes de reestructuración a nivel mundial de la compañía. Según informaciones aportadas por la CnBC, estos despidos afectarían al menos a un 10% de la plantilla, lo que supone unos 12.000 puestos de trabajo menos; además, añade que alrededor de tres cuartas partes de los recortes se producirán fuera de Estados Unidos. Otras fuentes hablan de que los despidos afectarán a un mínimo de 3.000 y un máximo de 5.000 empleados.
Por otra parte, desde Microsoft no citan números específicos todavía, únicamente han confirmado que empezarán a comunicar la pérdida de empleo a sus trabajadores a partir de hoy. “Microsoft está implementando cambios para servir mejor a nuestros clientes y socios”, ha informado la compañía en un comunicado. “Hoy estamos tomando medidas para notificar a algunos miembros del equipo que sus trabajos están bajo consideración o que sus posiciones serán eliminadas. Al igual que todas las empresas, evaluamos nuestro negocio de forma regular. Esto puede resultar en un aumento de la inversión en algunos lugares y, de vez en cuando, un repliegue en otros”.
Según varios medios se espera que los despidos comiencen hoy, como parte de una reorganización por la que el equipo de ventas de la compañía está redirigiendo su estrategia a los servicios en la nube de Azure. Microsoft se centrará principalmente en el sector privado, con especial foco en las pequeñas y medianas empresas, lo que supone un alejamiento de enfoques tradicionales como el gobierno, el petróleo y gas y el farmacéutico. El movimiento se produce durante el comienzo del año fiscal de la empresa, periodo en el que suelen producirse los cambios en la plantilla de la compañía.