La empresa informática española NPG ha sorprendido a todos con una reducción drástica de sus ingresos para 2014, según informaba ayer el diario Cinco Días. NPG, fabricante nacional de tabletas, televisores o reproductores de DVD y auriculares, había adelantado al Mercado Alternativo Bursátil (MAB), donde cotiza desde el pasado mes de abril, que preveía ingresar el pasado año 45,7 millones de euros. Yendo más allá, para 2015 las previsiones de ingresos ascendían a 66,7 millones y a 86,5 millones en 2016.
Sin embargo, la firma considera ahora que se quedará en 9,3 millones en 2014, nada menos que una quinta parte de los estimado en primera instancia. Además, la firma ha rebajado su Ebitda para el último ejercicio de 4,2 millones a 0,8 millones de euros.
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La compañía dice que la razón para esta revisión drástica de sus cuentas está en el retraso en la salida de las próximas licitaciones de televisiones del Gobierno mexicano, esperadas inicialmente para noviembre de 2014 y pospuestas “como consecuencia de la coyuntura económica”. En concreto, NPG preveía ingresar 22 millones de euros en Latinoamérica. Pero la facturación se ha quedado en cero euros. En China, la firma también ha tenido una rebaja de su negocio, y las previsiones inciales de 4 millones de euros se han quedado en algo más de dos millones en el gigante asiático.
Por su parte, en Europa la tecnológica gallega preveía facturar 19 millones, pero ahora considera que ingresará 7 millones. Fuentes de la empresa han asegurado a Cinco Días que los ingresos previstos para 2014 serán una realidad en 2015.
En su información a la Bolsa, NPG declara que la “no obtención de la primera licitación del Gobierno mexicano en septiembre de 2014 por no tener terminada la fábrica, provocó la paralización del crédito que iba a conceder Cofides por importe de 1,5 millones de euros para la terminación de la misma, teniendo que aportar NPG recursos propios desde España que estaban inicialmente destinados a productos para la campaña de Navidad”.
NPG tiene una fábrica en Madrid y otra en China. De hecho, según la empresa, es la única firma española con factoría propia en el país asiático. Esa instalación actualmente está centrada en la fabricación de Smart TV o televisores inteligentes.
