Una vez completada la adquisición de PeopleSoft por parte de Oracle el pasado 7 de enero, los directivos de la compañía de Silicon Valley ya han puesto en marcha las primeras regulaciones del llamado plan de integración de PeopleSoft. Un total de 5.000 antiguos empleados de la empresa adquirida serán despedidos en un plazo máximo de diez días. Esta decisión no sorprende a nadie puesto que Oracle había anunciado durante el largo proceso de compra que recortaría la plantilla entre 2.000 y 6.000 trabajadores para eliminar solapamientos en la estructura organizativa. De esta manera, la compañía de Larry Ellison se mantendrá el 90% de la plantilla de desarrollo de producto y de soporte técnico existente en PeopleSoft, unidades necesarias dado que los productos de la firma adquirida se seguirán comercializando y desarrollando (están finalizando PeopleSoft 8.9 y pronto comenzarán con la actualización 9.0), algo que se ha garantizado por activa y por pasiva en los últimos 18 meses.
Esta decisión de hacer recortes laborales en la empresa resultante de la fusión ya se vaticinó cuando Oracle lanzó la primera OPA hostil a PeopleSoft, allá por junio del 2003. El número final de trabajadores que formará la plantilla de Oracle será de 50.000.