El integrador valenciano Nunsys es el partner revelación del sector informático nacional en los últimos años. La firma ha ido creciendo a base de numerosas adquisiciones, y en febrero dio un salto de gigante con la compra de la también valenciana Sothis, la firma de tecnología de Juan Roig, el dueño de Mercadona.
La nueva Nunsys que sale de esta fusión tiene previsto llegar a los 140 millones de facturación en 2022, con más de 10 millones de EBITDA. En esta entrevista, Paco Gavilán, director general y principal accionista de la compañía, habla de esta compra y de las muchas que quiere hacer en el futuro para consolidarse como la mayor empresa tecnológica de capital nacional.
De hecho, en las próximas semanas espera cerrar otra adquisición en Barcelona. El objetivo de Nunsys es, sobre todo, multiplicar su presencia en la capital catalana y en Madrid, tener un portfolio lo suficientemente amplio como para que el cliente siempre tenga varias opciones entre las que elegir e internacionalizar su negocio, sobre todo el del software propio. Además, Gavilán se declara “activista” cuando toca hablar de cómo llevar los fondos europeos a las empresas locales.
Sothis cerró 2021 con una facturación de 72 millones y tiene 850 profesionales, mientras que Nunsys y las compañías que ha adquirido hasta ahora han facturado más de 50 millones en el último ejercicio y emplean a unas 500 personas. ¿Por qué Nunsys ha comprado Sothis y cómo se plantea la fusión?
Somos dos compañías muy complementarias. Tenemos las sedes sociales a 300 o 400 metros la una de la otra. Y afortunadamente abarcamos un abanico de tecnologías muy diverso. Y más del 70% de nuestros profesionales no se solapan tecnológicamente. Veíamos que podíamos aportar valor a los empleados y a los clientes.
Creo que las operaciones son buenas cuando de verdad son buenas para todas las partes. No vamos a generar sinergias con ahorros de costes, reduciendo estructura o prescindiendo de gente. En todo caso, reubicaremos personas y las dedicaremos a otras actividades dentro de la organización. En ninguna integración de Nunsys hemos buscado despedir personas, y no lo vamos a hacer esta vez. El compromiso con Angels [la firma de inversión de Juan Roig que era propietaria de Sothis] era el de no prescindir de recursos. Por el contrario, hay mucha posibilidad de cross-selling en los clientes.
“Más del 70% de los profesionales de Nunsys y Sothis no se solapan tecnológicamente”
¿En qué ámbitos se dan los solapamientos entre Nunsys y Sothis?
En sistemas, networking o ciberseguridad. De hecho, tenemos dos SoC (centro de operaciones de seguridad). Sin embargo, cuando profundizamos, cada compañía ha establecido acuerdos con fabricantes diferentes. En ciberseguridad, Nunsys está más en la parte industrial, y Sothis está más en la ciberseguridad de la administración pública. Después de varias semanas tras la compra, veo que hay una complementariedad espectacular.
Usted ha dicho que su objetivo es crear desde Valencia la mayor empresa tecnológica nacional. ¿Qué significa esto en términos de negocio y expansión y cómo piensa lograrlo?
Esperamos ser el líder de la tecnología en España. Y ya estamos en esa primera división que nos da objetividad a la hora de aconsejar a nuestros clientes de forma objetiva. No estamos obligados a colocar un producto, sino aconsejar el que va a ser más eficaz para el cliente. Tenemos vocación de ser la casa de encuentro de la tecnología española, y ahora hay muchas empresas candidatas para integrarse en nuestra estructura.
“No vamos a generar sinergias con ahorros de costes, reduciendo estructura o prescindiendo de gente”
¿Quién está detrás de la expansión de Nunsys?
Yo tengo el 72% de la compañía. Y luego hay cuatro compañeros que tienen el resto de la firma. Detrás no hay fondos de inversión ni nada. El secreto para hacer las cosas es que somos unos grandes generadores de free cash flow (flujo de caja libre). Y con esa generación de caja y reinvirtiéndolo todo estamos aprovechando la oportunidad de crecimiento que se presenta. Si se nos presentara un deal muy grande, echaríamos mano al acompañamiento financiero que haga falta. Pero mientras podamos seguir así, lo haremos.
¿Pero ha recurrido a los bancos para afrontar la compra de Sothis, por ejemplo?
Sí, claro. Además, los bancos nos han puesto todas las facilidades del mundo para sacar adelante esta operación. Y tenemos una capacidad de financiación excelente ahora. Pero es verdad que si quisiéramos dar el salto internacional, tendríamos probablemente que buscar más ayuda.
“El secreto para hacer las cosas es que somos unos grandes generadores de free cash flow”
En los últimos años, Nunsys ha avanzado a base de compras (SQA, CBD Dirac, Euroelecttra, el CPD de Tissat…). La de Sothis quizá ha sido la más relevante. Por lo que dice, entiendo que va a seguir tirando de chequera.
Nuestro plan no era llegar a 140 millones de euros en 2022, como ahora tenemos previsto. Esta cota la veíamos más a largo plazo. Pero surgió la operación de Sothis y hemos dado el salto más rápido. Creo que existe el hueco para que un agregador español como nosotros avance rápido porque la generación de sinergias es muy inmediata.
¿Vienen las compañías a Nunsys o peinan ustedes el mercado en busca de firmas que se puedan integrar en su estructura?
No tenemos una estrategia perfectamente definida en este caso. Nuestro modo de hacer las cosas es reactivo, y eso sorprende mucho a los expertos de negocio. Lo que tenemos son muchas empresas, unas 20 en estos momentos, que quieren unirse a Nunsys. Y la selección la hacemos entre esas. No vamos nosotros a buscarlas.
“Cuando se nos acerca una compañía de Madrid o Barcelona, la miramos con mucho cariño”
Y por eso creo que nos funciona este método, porque no forzamos ninguna operación. Además, somos muy escrupulosos a la hora de cumplir lo que prometemos. Y con el trato a las personas y con no herir sensibilidades. Eso sí, cuando se nos acerca una compañía de Madrid o Barcelona, la miramos con mucho cariño.
¿Y qué perfil tienen las empresas que ahora son más firmes candidatas a entrar en Nunsys?
Las dos más grandes que estamos viendo ahora están en ese punto de relevo generacional en la dirección. Es normal, además, que haya muchas empresas con problemas de continuidad porque la vocación en una empresa tecnológica tiene que ser muy fuerte. Porque la tecnología casi siempre te desborda. O tienes mucha vocación o te quedas fuera.
En 2018, Nunsys adquirió Tissat, un CPD de alta disponibilidad. Es raro ver a un partner de canal entrando en una inversión de este tipo. ¿Por qué dio este paso?
Nosotros siempre hemos sido una empresa de producto propio. Tenemos productos que son comercializados a nivel internacional con algún spin-off. Y buscábamos el crecimiento exponencial para estos desarrollos, y en modo SaaS. Además, el datacenter es el producto más rentable de Nunsys con diferencia. La inversión inicial es descomunal, pero, una vez hecha, la rentabilidad es una locura.
Tener un datacenter de proximidad nos daba una diferenciación sustancial con respecto a la competencia. Los clientes de este centro de datos suelen estar en la Comunidad Valenciana, y suelen ser empresas que hacen su primera aproximación al cloud. Se van al cloud, pero lo pueden tocar y lo tienen cercano. Y se sienten seguros.
“La inversión inicial en un datacenter es descomunal, pero, una vez hecha, la rentabilidad es una locura”
¿Está aprovechando Nunsys los fondos europeos que empiezan a llegar la economía española? ¿Se ha acreditado la compañía como agente digitalizador del programa Kit Digital?
Sí, Nunsys ya está acreditada como agente digitalizador. Además, la suma de Nunsys y Sothis tiene que ser capaz de facilitar la llegada de los fondos europeos a las empresas españolas. Si no lo hacemos perderemos competitividad, sobre todo si otros países sí que le sacan partido a los fondos. Socialmente nos vamos a mover a tope. Vamos a hablar con los políticos. Yo me considero un activista en este tema. Ayudaremos a que haya credibilidad sobre los fondos. El dinero ya ha llegado a las comunidades autónomas y los organismos, y ahora falta poner en marcha la maquinaria para que llegue a las empresas.
En cuanto a catálogo de productos y servicios, ¿cuáles son los puntos fuertes de la nueva Nunsys que sale de la compra de Sothis y qué querría añadir en el futuro?
Nuestro punto más fuerte es la diversidad tecnológica. En cualquier ámbito tenemos varias opciones y vamos a recomendar al cliente la que realmente es la mejor. No le vamos a colocar la que nosotros dominamos o vendemos. Hace falta tener mucho tamaño para ofrecer SAP, Microsoft y Sage, por ejemplo. Tenemos de todo en casi todas las áreas más comunes de tecnología para las empresas.
“Somos casi adolescentes todavía. Nos queda desarrollarnos a tope”
¿Qué nos falta? Ahora tenemos unas 100 personas en Madrid, y en Madrid deberíamos tener a unas 1.000 personas. En Barcelona también deberíamos tener otras 1.000 personas. Nos falta músculo en las principales zonas empresariales de España. También nos falta profundizar en la comercialización a nivel internacional de nuestro portfolio de producto propio. Hemos puesto el foco en 10 productos, todos muy diferentes: seguridad, recursos humanos, gestión de rutas escolares…
En el caso de Sothis, que acompaña a clientes de SAP por medio mundo, también tenemos que profundizar más en la internacionalización de los servicios por Latinoamérica, Europa o Estados Unidos. Somos casi adolescentes todavía. Nos queda desarrollarnos a tope.