Empezaremos 2016 con buenas noticias. Son las que nos traen los profesionales que se dedican a la cartelería digital o digital signage, que en el reportaje de cabecera del próximo número de CHANNEL PARTNER, que saldrá a primeros de enero, certifican el buen momento de su negocio y las posibilidades que se abren durante el próximo ejercicio. El digital signage creció a muy buen ritmo en 2015 (25%), una tendencia que se mantendrá o mejorará durante los próximos 12 meses si nada extraordinario sucede.
Los establecimientos han entendido que abordar el acercamiento al cliente desde una estrategia multicanal (en tienda, por Internet, por las redes sociales o por el móvil) es vital para estrechar lazos con sus potenciales compradores e incrementar las ventas. Pero también han comprendido que una apuesta seria por la cartelería digital redunda en lo mismo y permite además lanzar una imagen de modernidad. Adicionalmente, con la aparición de tecnologías como los beacons y lo que está por llegar en el ámbito del Internet de las cosas va a quedar resuelto el problema de la medición de audiencias, uno de los obstáculos que hasta ahora frenaba la inversión.
Sin embargo, el canal tendrá que ponerse las pilas para no dejar escapar la oportunidad que presenta el digital signage. Y es que, aunque los partners pueden dedicarse a la venta de soluciones paquetizadas de bajo coste, el mayor interés estará en los proyectos grandes y complejos donde el hardware (pantallas y players) son sólo una parte más. Y es que el sector del digital signage necesita revendedores capaces de lidiar con el despliegue de estos equipos, pero también de hacer labores de consultoría e integrar el hierro con software de gestión específico, canales de publicidad e infraestructura de acceso a la red. De hecho, operadoras como Telefónica o Vodafone ya se están interesando por estos proyectos, sobre todo por la importancia que adquiere la parte de comunicaciones en los mismos.
En fin, que es muy probable que 2016 sea el año del despegue definitivo del digital signage en España. Esperemos también que sea el año del canal que trabaja este nicho. Proyectos como los de Carrefour, que ha implantado cientos de pantallas en más de 60 de sus centros comerciales, o del Zara de probador virtual, o el de un integrador español que está instalando displays en restaurantes de comida rápida de una importante cadena en nada menos que 20 países, tendrán sin duda efecto contagio. En el alero está el futuro del comercio tradicional, que hoy se la juega frente a los grandes nombres del e-commerce.