La inestabilidad económica de los mercados maduros está haciendo que las economías emergentes hayan pasado a ser el motor del crecimiento de las multinacionales. La recesión obligó a muchas multinacionales a dejar de crecer, pero se ha detectado un renovado movimiento de personal a nivel mundial: Según un estudio de Economist Intelligence Unit, un 39% de las empresas piensan aumentar su personal expatriado durante los próximos cinco años.
Los resultados de la última edición de la encuesta bianual Regus Business Tracker muestran que un 36% de las empresas a nivel global piensa contratar personal en 2011. Las empresas españolas, sin embargo, son menos optimistas: un 27% de ellas piensa incrementar su personal en 2011. Es un indicativo por debajo de la media a pesar de la creciente voluntad de plantearse volver a invertir en crecer y expandirse.
Importancia de los costes
En la actualidad, la tecnología móvil, el acceso a Internet y el comercio internacional han hecho que también las pequeñas empresas se sumen a la búsqueda de nuevas oportunidades en los mercados de ultramar. Sin embargo, muchos de los costes que implica la conquista de un nuevo mercado son inevitables, como por ejemplo los costes legales.
Recortar costes de personal o de marketing resulta contraproducente, sin embargo, se pueden reducir aquellos destinados a la propiedad inmobiliaria. La opción de una oficina virtual ofrece poder acceder a un domicilio social de primer orden, por un precio mensual establecido, con un número de teléfono propio, contestado por una recepcionista local, y gestión del correo. Teniendo acceso a salas de reuniones, alquilables por una hora, un día o más.
Tenemos el ejemplo de Elisa Peris Despacho Profesional, asesoría sobre Propiedad Intelectual e Industrial localizada en Valencia, pero con un ámbito de actuación internacional en defensa de las empresas españolas en el extranjero. Entre los servicios de Regus, que dan apoyo para afrontar sus necesidades de negocio, Elisa destaca el servicio de recepción y atención al cliente, personalizado y directo, de manera que no sea necesario preocuparse por nada más.
Algunos exportadores usan permanentemente oficinas virtuales, otros las usan como punto de partida, pasando a una oficina totalmente equipada en el mismo domicilio cuando ya han probado el nuevo mercado y están listos para ampliar su presencia y su plantilla.