Si en la tribuna del mes pasado hablábamos de cómo la revolución digital, en su avance acelerado, impone su hegemonía y adaptarnos a sus características será imprescindible para ajustarse al futuro, en esta ocasión querría abundar en las ingentes oportunidades profesionales que esta transformación está generando. “Cheatsheet” es el término que los angloparlantes emplean para referirse a los resúmenes de fórmulas, procedimientos, hechos o conceptos claves para un fin dado. La traducción de “chuleta” la situaría en el ámbito de lo incorrecto en nuestra cultura académica, pero en el mundo tecnológico se emplean con fruición, de tal manera que un centro tan prestigioso como Princeton publica un cheatsheet de Java muy recomendable.
En las siguientes líneas pretendo esbozar los dos primeros apartados de un job cheatsheet que sirva como brújula para futuros ingenieros o ingenieras de software, así como para perfiles técnicos de carreras como física, matemáticas, informática o telecomunicaciones, a la hora de afrontar el salto o la mejora profesional. Dentro del área de ingeniería, en U-tad formamos a profesionales digitales en perfiles de grado o CFGS –FP Superior- y de postgrados de big data, ciberseguridad, realidad virtual y computación gráfica, y las siguientes recomendaciones surgen de nuestra trayectoria.
“Be Cloud my friend”. Los desarrollos de software han abrazado los paradigmas de computación en la nube y los microservicios, por lo que todo profesional técnico debería adquirir experiencia, al menos a nivel de usuario, de alguno de los principales servicios porque todo es materialmente imposible, de Amazon Web Services, Microsoft Azure o Google Cloud. Casi todas las plataformas disponen de programas para educación en los que regalan “créditos” –dinero en servicios cloud- para estudiantes y profesores. U-tad fue el primer centro universitario español en unirse al programa AWS Educate, pero muchas universidades se han sumado, por lo que sería muy recomendable probar. Una aproximación en la nube permite “variabilizar”, es decir, convertir los costes de inversión fijos en costes variables según volumen, los costes en infraestructuras.
“Share and join”. La eclosión de los paradigmas de código abierto –open source- han generado dinámicas colaborativas que se expanden al conjunto de la actividad. Disponer de espacios en los principales repositorios de código, con GitHub como eje central, donde publicar los trabajos y colaboraciones, se ha convertido en la tarjeta de presentación digital. Realizar contribuciones a proyectos open source -hay muchos roles posibles- se valora especialmente por los empleadores más avanzados. Participar en comunidades técnicas de resolución de dudas como Stackoverflow o en quedadas técnicas como las organizadas a través de Meetup –las comunidades técnicas de U-tad las dinamizamos así- o específicas, como los DataBeers, mostrarán la implicación personal.