A pesar de que el Black Friday de este año rompió moldes y de que en durante el viernes negro muchos usuarios adelantan sus compras navideñas, las previsiones para la campaña de final de año son buenas, según los últimos datos de GfK. El Black Friday este año generó unas ventas de equipamiento tecnológico un 24% superiores a las de 2015. En cualquier caso, GfK estima que el periodo de Reyes seguirá siendo el más fuerte de la temporada, con un peso entre el 30 y 35% del total. Estos datos provienen de la consulta de GfK a 6.600 retailers online y físicos del sector informático repartidos por toda España.
GfK asegura que los televisores, smartphones y los portátiles fueron los productos favoritos en el Black Friday, representando un 24%, 21% y 17% de las ventas, respectivamente. De hecho, las compras de televisiones aumentaron un 29% en relación a 2015, mientras que las de smartphones crecieron un 27%, y las portátiles, un 21%. Asimismo, durante la semana del Black Friday, el 20% de las compras se hicieron a través de Internet y fue especialmente positiva para productos que durante el resto del año no tienen momentos de gloria, como las tablets, que incluso aumentaron sus ventas un 7% frente a 2015.
La semana del Black Friday cada vez es más significativa en toda la campaña: representó un 12% de las ventas en 2013, un 14% en 2014 y un 18% en 2015, y se espera que para este año sea más del 20%. Dado que el Cyber Monday (10% de las ventas de la temporada) es una promoción mayoritariamente online, las compras se concentraron en gran medida a través de este canal, si se comparan con las registradas en el Black Friday. Un 34% de las ventas se realizaron por internet, un 26% más que el año anterior, siendo la semana donde el canal online tiene mayor peso de toda la campaña de Navidad.
El destacado incremento de las ventas en las semanas del Black Friday y del Cyber Monday hacen que la segunda, tercera y cuarta semana de diciembre tengan este año menos importancia. Si se compara con años anteriores, estas tres semanas representaban un 45% de las ventas totales de la campaña navideña en 2013, un 43% en 2014 y un 39% en 2015.
Con estos datos, se observa que cada vez más el Black Friday anticipa parte de las ventas de Navidad y cambia el hábito de los consumidores ante sus compras esta temporada. Sin embargo, el análisis de GfK prevé que el periodo de Reyes seguirá siendo, al menos todavía este año, el más fuerte de todas las navidades, con un volumen de ventas que supondrá alrededor de un tercio del total de la campaña. En suma, se espera un crecimiento del 5% de las ventas en toda la campaña.