Cataclismo en el retail de electrónica e informática estadounidense. La cadena de tiendas RadioShack, una de las más grandes de históricas del país, informó que podría declararse en bancarrota si su situación de liquidez empeora. Lo hizo tras reportar pérdidas por décimo trimestre consecutivo.
Pero la bancarrota no es la única opción que maneja la firma. La compañía ha dicho que está igualmente sopesando otras opciones, como la venta o una inversión, y que la liquidación es el último recurso. RadioShack no levanta cabeza desde 2010, momento en que sus ventas empezaron a caer. La compañía ha asegurado que está trabajando con sus acreedores y sus propietarios para reestructurar su deuda y reducir costes.
Como consecuencia de la noticia, las acciones de RadioShack se precipitaron un 20% el miércoles y ahora rondan el dólar, un duro revés para unos títulos que llegaron a los 78 dólares en la cima del boom de las puntocom. La compañía informó que las ventas totales se hundieron a su nivel más bajo en más de 20 años. Por su parte, en el segundo trimestre, las pérdidas netas aumentaron hasta los 137 millones de dólares, mientras que los ingresos cayeron cerca de un 22%, hasta los 673 millones de dólares.
RadioShack intentó cerrar 1.100 tiendas este año, pero rebajó la cifra a 200 por año cuando los acreedores desestimaron el plan. La cadena lleva abierta más de 90 años y es un referente en el paisaje urbano de muchas ciudades del país. Sin embargo, no ha sabido adaptarse a unos tiempos en que dominan gigantes electrónicos como Amazon o eBay, y donde rivales como Best Buy han ido minando su posición.
