La cadena de tiendas de electrodomésticos, informática y electrónica de consumo Miró invertirá 23 millones de euros en la apertura de 34 centros hasta 2016. Los nuevos establecimientos se ubicarán principalmente en Cataluña, Comunidad Valenciana y Baleares y generarán unos 300 puestos de trabajo.
Al mismo tiempo, el retailer ha renovado su imagen y de salir adelante su plan de expansión, podría alcanzar las 100 tiendas a finales del año que viene. En cuanto a ingresos, Miró facturó 145 millones de euros durante el último ejercicio y tiene una previsión de 170 millones de euros para el presente.
En la actualidad, la firma cuenta con 500 trabajadores, con lo que al final de este proceso de expansión, la plantilla rondará las 800 personas. A corto plazo, la estrategia de Miró para 2015 incluye la apertura de siete nuevos centros entre los meses de julio y octubre. La inversión media prevista para la apertura de cada nuevo centro es de 600.000 euros, siendo la inversión presupuestada de cuatro millones de euros, a los que se añaden los 3,3 millones invertidos en la modernización de tiendas y la nueva imagen corporativa.
El plan de negocio de Miró contempla una segunda fase de crecimiento en 2017, que se ajustará en función de la evolución hasta diciembre del año que viene, y que contempla un crecimiento mediante un modelo de adquisiciones. Miró, empresa de capital español, tiene su sede central en la localidad de Martorell (Barcelona) y cuenta con más de 40 años de historia.
