El informe ‘La evolución de Internet. Cinco premisas para el futuro. Tres ejes de incertidumbre y cuatro escenarios para 2025, elaborado por Cisco Systems y GBN (Global Business Network) y traducido y editado por Fundación Telefónica, tiene como objetivo contribuir a los diferentes debates y esfuerzos que tratan de aprovechar el gran potencial de Internet y las redes IP, y describe los escenarios e incertidumbres de Internet de los próximos quince años. Una de sus principales conclusiones es que la Red será palpitante y estará desbordada, pero también ofrecerá inseguridades e, incluso, decepciones.
Concretamente, sirviéndose del método del análisis de escenarios, expertos de Cisco y miembros de GNB han dibujado en la publicación tres ejes de incertidumbre: construcción de redes, evolución tecnológica y comportamiento de los usuarios, que sintetizan variables críticas que determinarán el futuro de Internet. Del cruce de estas incertidumbres han obtenido cuatro escenarios: palpitante, inseguro, decepcionante y desbordado, que plantean un desarrollo de Internet atípico en comparación con los estudios hasta ahora realizados.
Los expertos del informe aventuran una nueva brecha digital entre los que tienen acceso e enclaves protegidos de la Red por medidas de seguridad costosas y los que se mueven con recelo en un Internet gratuito y peligroso. Esto se debe en parte a que, a pesar de su crecimiento explosivo, Internet aún se encuentra en su adolescencia e incluso en su infancia: sin ir más lejos, menos de un tercio de la población mundial ha navegado por ella (casi 5.000 millones de personas aún no lo han hecho). En contraste, se estima un crecimiento exponencial en el comercio electrónico, que alcanzará según las previsiones, un volumen de 8.000 millones de dólares anuales en los próximos quince años.
La interacción de las decisiones que tomen hoy usuarios, empresas y autoridades políticas determinarán la evolución de Internet. Entre las premisas de futuro, destacan el crecimiento de Internet en los países en vías de desarrollo, la inalterabilidad del Gobierno global de Internet, la nueva relación de los nativos digitales con la Red, el cada vez más relativo papel del teclado actual como interfaz principal o las nuevas formas en que los usuarios pagarán por conectarse.
