El danés Jesper Trolle asumió el cargo de CEO en Exclusive Networks hace seis meses. Y hoy hace balance de lo que fue el 2020 para el mayorista de matriz francesa, pero que ya está en 50 países y hace frente a los gigantes estadounidenses del mayoreo de tecnología, como Tech Data, Ingram Micro o Arrow.
En el año de la Covid-19, Exclusive, que tiene un portfolio muy centrado en soluciones de ciberseguridad y para el centro de datos, logró crecer de forma orgánica (sin adquisiciones) un 8%, y elevó sus ingresos totales a 2.600 millones de euros. Además, Exclusive fue capaz de incrementar su plantilla en 450 personas, gracias sobre todo a la compra de empresas como Nuaware (Reino Unido), Veracomp (Polonia) o JJNet (Hong Kong). Y engrosó su oferta de producto con tecnologías de 17 nuevos fabricantes, como Proofpoint, Infoblox o Vectra.
En 2020, Exclusive también puso en marcha la plataforma X-OD (Exclusive Networks on Demand) para favorecer el consumo de cualquier tecnología “como servicio”, contribuyendo al rápido crecimiento del negocio basado en la suscripción. En España, esta plataforma está disponible para los distribuidores desde el pasado noviembre.
Jesper Trolle pronostica que en la primera mitad de este 2021, todo indica que se mantendrá la inercia de crecimiento de la que disfruta Exclusive desde el comienzo de la pandemia, y que en la segunda mitad del ejercicio, el mercado se “normalizará”. “Los mercados europeos han evolucinado bien durante la pandemia”. Además, anuncia que la plataforma X-OD estará disponible para el mercado estadounidense en el segundo trimestre del año. Sobre el Brexit, asegura que a finales de 2020 tuvo “un poco de impacto” en la actividad de Exclusive, haciendo que algunos proyectos se pospusieran, pero su incidencia en la actividad ha sido limitada.
“La oportunidad de avanzar es significativa. Exclusive Networks está idealmente situada en el centro de una tormenta perfecta. El enfoque acelerado hacia la transformación digital, la adopción acelerada de la nube y el trabajo distribuido y una mayor dependencia de la seguridad y la integridad nos sitúan en una coyuntura de gran oportunidad”, asegura por su parte Andy Travers, vicepresidente de ventas y marketing de Exclusive.
En España, la compañía facturó en 2020 81 millones de euros, según las estimaciones de CHANNEL PARTNER. En 2019, la firma que capitanea Carmen Muñoz registró unas ventas de casi 74 millones de euros y reportó al Registro Mercantil unos beneficios de 2,1 millones.
El interés de los fondos de inversión por los grandes mayoristas multinacionales
En 2018, el fondo privado Permira se hacía con una participación mayoritaria en Exclusive Networks. Según fuentes cercanas a la operación, Permira pagó 1.300 millones por hacerse con el control del mayorista. En teoría, la entrada de Permira debía acelerar el crecimiento de una firma que, desde su fundación, avanzaba a golpe de adquisiciones. De hecho, para este 2020, el objetivo declarado en su momento por la dirección de Exclusive era llegar a 5.000 millones de euros de facturación, casi el doble de lo que finalmente ha alcanzado. En cualquier caso, el interés de un fondo como Permira en un mayorista informático no es una historia aislada, sino una tendencia del mercado. Y es que los fondos de inversión están invirtiendo en mayoristas porque, a pesar de ser negocios con un EBITDA bajo, mantienen un crecimiento muy estable. Lo que no es poco en esta era de incertidumbre. Y, por otro lado, lo hacen porque así se aseguran estar en el centro de la transformación digital que está cambiando para siempre las empresas y la economía. No hay que olvidar que en los últimos tiempos, gigantes como Tech Data, Ingram Micro o Also han pasado a manos de estos fondos. Y probablemente no serán los únicos.