El sector informático padece desde hace años un déficit crónico de profesionales. Uno de las áreas donde más evidente es esta brecha entre demanda y oferta laboral es la de la ciberseguridad. Según ObservaCiber, en España unos 125.000 empleados trabajan en ciberseguridad. Pero se requieren muchos más.
Actualmente hay una brecha de 30.000 vacantes sin cubrir, lo que está llevando a casi la mitad de las organizaciones a utilizar la formación y cualificación de personal interno para cubrir los puestos existentes, tal y como señala INCIBE. Para 2024 se calcula que se necesitarán 80.000 nuevos profesionales de ciberseguridad, una cifra que se incrementa cada año.
Este escenario pone de manifiesto la necesidad de adaptación del mercado laboral, como señalan desde el integrador de soluciones de ciberseguridad Secure&IT. Entre las principales razones está el desconocimiento generalizado del sector y la necesidad de una mejor definición de los perfiles. Además, es necesario fomentar la formación, tanto por parte de las empresas como por los centros educativos, para revertir así, la falta de concienciación que se sigue dando en el sector.
Los perfiles más buscados son aquellos relacionados con cloud computing, análisis de riesgos, inteligencia artificial o gobernanza. Pero no son los únicos, el sector brinda muchas oportunidades, no solo en el ámbito técnico. Elena Timón, responsable de personas de Secure&IT, explica: “Sí es cierto que el sector técnico abarca la mayoría de los puestos, pero también hay que cubrir otros campos, como la comunicación, el marketing o el derecho TIC, entre otros. El abanico es amplio y las opciones muy diversas”.
La brecha de género en ciberseguridad
Otra de las preocupaciones del sector sigue siendo la brecha de género, aunque es cierto que, según INCIBE, el número de mujeres que trabaja en el mundo de la ciberseguridad ha aumentado considerablemente, en torno al 30%. En este sentido, el Foro Económico Mundial vaticina que hasta el año 2150 no se igualará el número de hombres y mujeres dedicados al mundo de la tecnología.
La falta de mujeres se debe, prácticamente, a las mismas razones que la escasez de profesionales, pero va un poco más allá, pues los estereotipos o falta de visibilidad de las mujeres del sector están afectando en este sentido. Por este motivo, han surgido diferentes organizaciones que tratan de promover los estudios STEM, así como las habilidades digitales, entre las niñas y adolescentes. El objetivo es optimizar las oportunidades para mujeres empresarias, y reducir los estereotipos de género en este sector.
Ante esta situación, Timón asegura que es necesario fomentar el aumento de profesionales y, en concreto, de mujeres en el sector TIC. “Lo podemos conseguir trabajando aspectos como la formación o la concienciación, la creación de planes de carrera, el aumento de la visibilidad de las mujeres del sector o la eliminación de los estereotipos”.