Según adelantaba el pasado fin de semana el diario ValenciaPlaza, el Hospital General Universitario de Valencia sufrió un posible ataque informático en la mañana del viernes. El incidente obligó al centro sanitario a cortar la red informática durante parte de la mañana. Según explicaban fuentes del hospital a este medio de información, por precaución, y siguiendo el protocolo del hospital, se procedió a cortar la red para realizar un aislamiento del resto del sistema de la Conselleria de Sanidad.
El ataque recuerda al que hace unos meses sufrió el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), que dejó fuera de servicio más de 700 oficinas de esta entidad pública en toda España, así como la atención online, y cuyos efectos se prolongaron durante semanas. En este caso, según ValenciaPlaza, el problema no ha ido a más.
A parecer, el ataque al hospital se hizo a través de un ransomware destinado a cifrar archivos y bloquear ordenadores con la idea de obtener dinero a cambio de devolver el funcionamiento normal al sistema. Las autoridades valencianas que investigan el incidente apuntan a que el origen del ataque podría haber sido un pendrive que alguien introdujo en algún equipo y que hizo saltar las alarmas.
Durante estos días se hará una revisión forense de los sistemas para ver si ha podido quedar algún elemento malicioso residual en algún equipo, y además, dilucidar cómo ha podido entrar el virus. En juego está la integridad de un sistema informático que permite acceder a los datos de los pacientes, seleccionarlos y enviar los resultados de las pruebas, lo que complicó el funcionamiento del servicio de urgencias del hospital, por ejemplo.
